recogiendo las notas en el despacho del director
Fin de curso, otro duro año más con noches interminables de estudio, mucho café para aguantar despierta y un montón de quebraderos de cabeza para sacar las notas más altas... Este es el día a día de cualquier jovencita universitaria que quiere labrarse un porvenir y se preocupa por su futuro, pero no siempre da resultados emplearse a fondo porque hay asignaturas que se resisten. Concretamente, a esta teen se le resisten las matemáticas y es que por mucho que intente entenderlas no hay manera, afortunadamente sus profesores no son los típicos que la suspenden con un porque valoran el esfuerzo de todo un año y suben hasta el 5 para que pase de curso, no sería justo suspenderla. Aunque es cierto que en compensación tendrá que hacer un trabajo extra en el despacho del director, no es nada comparado con la satisfacción de pasar el curso limpio con todas aprobadas, ¿verdad chicas?:D.